El nacionalismo constitucional de Coalici贸n Canaria
* Paulino Rivero 茅s el President de Coalici贸n
Canaria
Coalici贸n Canaria acaba de celebrar su II Congreso Nacional en
el que, adem谩s de elegir a los miembros de la Comisi贸n
Ejecutiva Nacional que tengo el honor de presidir, ha perfilado
el conjunto de ideas, estrategias y claves de lo que entendemos
que debe ser el moderno nacionalismo canario o, lo que es lo
mismo, nuestro proyecto pol铆tico para los pr贸ximos diez a帽os.
Pese a los inevitables t贸picos, Canarias no s贸lo se conforma
por unos territorios insulares y un mar com煤n que nos rodea,
sino tambi茅n por una rica Historia, un acervo econ贸mico y
fiscal propio y un modelo pol铆tico-administrativo diferenciado
del continental. Asimismo, los que habitamos estas 铆nsulas
poseemos una personalidad cultural acentuada, unas costumbres y
tradiciones diferenciadas, adem谩s de una modalidad ling眉铆stica
singular.
Todos esas se帽as identificadoras hacen que Canarias sea una Naci贸n,
Nacionalidad en terminolog铆a constitucional, debido
fundamentalmente a tres factores distintos: uno de tipo geogr谩fico,
el hecho insular y archipel谩gico -nuestro m谩s aut茅ntico hecho
diferencial-; un segundo factor, hist贸rico-cultural, que se ha
ido construyendo a partir del substrato popular aborigen y
enriqueciendo por las aportaciones europeas (normandos,
castellanos, portugueses, genoveses, etc茅tera) y americanas (paso
obligado en la ruta de las Am茅ricas y por el retorno de
colonizadores y emigrantes de EE UU, Cuba, Venezuela, Argentina,
Uruguay, etc茅tera a lo largo de cinco siglos), lo que ha dado
como resultado un mestizaje 茅tnico-cultural 煤nico. Y, por 煤ltimo,
un tercer factor, que es s铆ntesis y derivaci贸n de los dos
anteriores: la conciencia compartida de esa historia com煤n, de
nuestras peculiaridades culturales, econ贸micas y geogr谩ficas.
La conciencia de una identidad colectiva propia que podemos
expresar como Canariedad.
Estos factores han motivado que los canarios hayamos querido
asumir definitivamente nuestra condici贸n de Pueblo y,
consecuentemente, tengamos la firme voluntad de seguir ejerciendo
y potenciando el autogobierno, ahondando en la b煤squeda de
mayores espacios de decisi贸n. Ello ha venido reforzado por el
hecho de que ese autogobierno, que en agosto cumplir谩 20 a帽os,
nos ha permitido salir de la miseria y el atraso que secularmente
nos azotaba, proporcion谩ndonos una mejora considerable de las
condiciones de vida, originando la aparici贸n de las generaciones
mejor formadas y m谩s conscientes de su propia identidad de toda
nuestra Historia, algo que, sin duda, nos aleja del peligro, pese
a los problemas de crecimiento poblacional y deterioro
medioambiental, de caer en la endogamia, la xenofobia o la
intolerancia.
Este moderno nacionalismo canario es democr谩tico y universal;
tolerante e integrador; archipel谩gico y atlantista; progresista
y conservacionista, constitucional pero reivindicativo, que
quiere guardar un exquisito equilibrio entre el pragmatismo que
da la asunci贸n de responsabilidades de Gobierno y el logro de
los objetivos pol铆ticos. Es constitucionalista porque se puede
ser nacionalista canario dentro del Estado espa帽ol y la Uni贸n
Europea, contribuyendo a su gobernabilidad, pero reivindicativo
porque no renunciamos de antemano, en ejercicio de los Derechos
del Pueblo canario y en defensa de sus leg铆timos intereses, a
nuevas v铆as de relaci贸n entre Canarias y el Estado espa帽ol y a
mayores espacios de decisi贸n propia que puedan abordarse,
incluso, desde una eventual reforma de la Constituci贸n o del
Estatuto de Autonom铆a.
Con ese Estado Plurinacional que es el Estado espa帽ol, Canarias
se puede relacionar multilateral o bilateralmente. CC tiene
vocaci贸n, as铆 lo hemos venido demostrando en los 煤ltimos a帽os,
de participar en sus instituciones y en los grandes debates en
torno a su modernizaci贸n y reforma, contribuyendo desde la visi贸n
desapasionada que da la distancia a la resoluci贸n de los
problemas de los que adolece, reivindicando la pronta adopci贸n
de decisiones acordes con un modelo pol铆ticamente
descentralizado, con especial consideraci贸n a las
especificidades derivadas de los hechos diferenciales de
determinados territorios.
Los hechos diferenciales espec铆ficos de Canarias -insularidad,
fragmentaci贸n y lejan铆a-, adem谩s de los comunes con otras
nacionalidades -cultura y m谩ximas cotas de autogobierno-, nos
permiten mantener una posici贸n ventajosa, pese a la resistencia
de las formaciones estatales que, como ha sucedido a lo largo de
los siglos, se resisten a asumir definitivamente la necesidad de
atender esas especificidades canarias.
Para ello, para que se atiendan nuestras singularidades, es
imprescindible conservar, incluso aumentar, el poder pol铆tico,
el apoyo electoral, tanto en el 谩mbito canario como en el
estatal (a trav茅s, respectivamente, de mantener el Gobierno de
Canarias y los Grupos Parlamentarios en el Congreso y el Senado)
que nos permita contribuir a la gobernabilidad de las distintas
instituciones estatales a cambio del respeto a la canariedad y
nuestras especificidades.
En suma, es perentorio seguir utilizando todos los medios
posibles para trasladar a los centros de poder estatales la
necesidad de evolucionar pol铆tica y constitucionalmente el
actual Estado de las Autonom铆as, haci茅ndoles comprender que
nuestras especificidades pol铆ticas, culturales y econ贸mico-fiscales,
junto con los problemas derivados de la fragmentaci贸n insular y
la lejan铆a, como hechos aut茅nticamente diferenciales, no s贸lo
justifican, sino que requieren, un amplio nivel de autogobierno,
propio y diferenciado.
Entre nuestras prioridades destacan, en el plano econ贸mico-social,
la consecuci贸n del pleno empleo y la consolidaci贸n del Estado
del Bienestar, mientras que en el auton贸mico por una eventual
reforma que convierta al Senado en aut茅ntica expresi贸n del car谩cter
plurinacional del Estado. Pero sobre todo pondremos nuestro empe帽o
en conseguir que las instancias centrales (en especial los dos
grandes partidos) asuman definitivamente una interpretaci贸n
flexible del bloque constitucional -formado por la propia
Constituci贸n y por el Estatuto de Autonom铆a- como marco de las
relaciones de Canarias con el Estado. La lectura sosegada del
mismo llevar铆a a aceptar cuestiones de vital importancia para
Canarias: el efecto vinculante del Informe del Parlamento de
Canarias en las modificaciones del REF previsto constitucional y
estatutariamente; la transferencia de todas aquellas competencias
en las que tenga alguna incidencia el hecho insular -puertos y
aeropuertos, transporte a茅reo, comercio exterior, sanidad
exterior, establecimiento de relaciones con pa铆ses de nuestro
entorno geogr谩fico y cultural, etc茅tera-; la cesi贸n del resto
de impuestos que den como resultado la existencia de una aut茅ntica
Hacienda P煤blica canaria o la participaci贸n directa ante los 贸rganos
comunitarios como expresi贸n del reconocimiento y consolidaci贸n
del Estatuto Permanente de Canarias como Regi贸n Ultraperif茅rica
de la Uni贸n Europea.
Adem谩s de todo ello, este II Congreso de CC ha supuesto la
adopci贸n de un modelo organizativo unitario, avanzando desde una
mera coalici贸n electoral en 1993 hacia una federaci贸n de
organizaciones insulares, lo que redundar谩 en la cohesi贸n
interna e ideol贸gica de nuestra formaci贸n a la hora de poner en
pr谩ctica nuestro ambicioso proyecto pol铆tico.
Aun as铆, dos son las cuestiones que copan la preocupaci贸n de
todos los canarios y que han tenido una atenci贸n especial por
parte de CC. Me refiero al fen贸meno del crecimiento poblacional
que ha experimentado Canarias en la 煤ltima d茅cada (m谩s de 300.000
personas) y, lo que es m谩s preocupante, el desmesurado aumento
registrado en el 煤ltimo a帽o como consecuencia del gran
desarrollo econ贸mico y tur铆stico (65.000 personas). Esta
llegada masiva de personas venidas de fuera no s贸lo agudiza el
deterioro del medio ambiente (en un territorio reducido que
cuenta con el 40% de su espacio protegido), sino que puede
ocasionar problemas econ贸micos, sociales y culturales (falta de
infraestructuras viales, sanitarias y educativas, consumos
insostenibles de agua y energ铆a, etc.). En consecuencia, adem谩s
de la moratoria tur铆stica actualmente en vigor, hemos lanzado el
debate en nuestro reci茅n celebrado c贸nclave sobre la necesidad
del control del crecimiento mediante un proceso de desarrollo
sostenible que incluya medidas normativas y administrativas que
afecten a la residencia, el trabajo y la propiedad de for谩neos
en Canarias, en sinton铆a con lo dispuesto en el art铆culo 37.1
de nuestro Estatuto de Autonom铆a.
La otra gran cuesti贸n es la seguridad ciudadana. Coalici贸n
Canaria va a apostar por la adopci贸n de pol铆ticas propias en
esta materia, a trav茅s de la creaci贸n de la Polic铆a Auton贸mica
como complemento a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado,
dada la escasa capacidad de la Administraci贸n central tanto para
cubrir todas las plazas vacantes existentes en Canarias, como
para reducir los 铆ndices de criminalidad, especialmente en un
territorio como el nuestro, que depende econ贸micamente del
Turismo, sector que exige para su estabilidad las m谩ximas cotas
de seguridad.
En definitiva, el moderno nacionalismo que encarna Coalici贸n
Canaria ha alcanzado la madurez en este Congreso, apostando por
la consecuci贸n de un gran respaldo social que nos permita
participar activamente en la gobernabilidad de las instituciones
canarias y estatales como medio para atender adecuadamente las
especificidades del hecho insular y profundizar en nuestro
autogobierno.
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