El alquiler y el PSM
Hace unos dÃas comentaba con un amigo el problema del costo
de la vivienda , que impide el acceso a ella a importantes núcleos
de población, sobre todo jóvenes, asà como la falta de
viviendas en alquiler a precios asequibles a pesar de que, según
informes de la prensa, existen muchas viviendas desocupadas.
La compra de viviendas, aprovechando los bajos intereses
hipotecarios, es un riesgo cuando se acude a ellos sin seguridad
en la estabilidad laboral. Cualquier subida en el tipo de
intereses- sobre lo que ya se alerta por las Cajas de Ahorro-
puede suponer un peligroso aumento de los impagados con todas sus
graves consecuencias económicas.
Tampoco existe una razón justificativa para promocionar la
compra de viviendas por parte de un sector juvenil de economÃa aún
no consolidada, al igual que con indudable inestabilidad de
pareja, con las frecuentes problemáticas familiares que ello
supone en casos de separación cuando la compra precipitada se ha
realizado a favor de los dos conviventes que pronto dejan de
serlo.
Por todo ello parece que la vÃa más acertada serÃa la
potenciación del alquiler. Y en este punto me comentaba mi
amigo, propietario de algunos pisos en la ciudad, que no se atrevÃa
a alquilar. Si el inquilino no paga la renta, como sucede con
frecuencia, o convierte la vivienda alquilada en una pensión de
acogida o de cualquier forma incumple el contrato, el
procedimiento de desahucio puede suponer una espera superior al año,
plazo durante el cual se sigue utilizando la vivienda
gratuitamente por el moroso, consumiendo la electricidad,
impagando los gastos de la comunidad, y al final te dejan la casa
como unos zorros y hay que gastar un dineral en repararla con el
fin intentar alquilar de nuevo a ver si hay más suerte.
Desesperado por sus experiencias estaba pensando en vender esos
pisos y dejarse estar de arrendamientos.
HabrÃa que buscar una solución, me decÃa, y tendrÃas que
escribir sobre ello. Si hacen falta viviendas en alquiler deberÃa
constituirse una entidad social de carácter municipal a la que
el propietario pudiera encomendar el alquiler de sus viviendas
para que a través de la misma se cediera su uso a terceros en
las condiciones sociales y con las garantÃas que se estimara
oportuno. Esta entidad asegurarÃa al propietario proveedor de
las viviendas el cobro puntual de la renta- con la deducción
justa por la gestión- y asumirÃa el control y responsabilidad
del uso por parte de sus cesionarios. Estos pagarÃan una tasa o
impuesto de forma que el impago de la misma pudiera dar lugar a
una inmediata ejecución y automática cesación en dicho uso, y
darÃan garantÃa por el mantenimiento adecuado de la vivienda
con responsabilidad frente a la Administración.
Leyendo las noticias de la semana me encuentro con una proposición
no de ley el PSM para facilitar a los jóvenes el acceso a la
vivienda en la que entre otras cosas aporta una idea similar a la
mi amigo con el fin de crear una bolsa de pisos de alquiler y un
programa de subarriendo para que sean las instituciones las que
alquilen las viviendas y las pongan después en manos de los jóvenes.
Yo soy de los que creen que con una buena ley de arrendamientos
que dejara de utilizar a los propietarios para hacer «justicia
social» a su costa y que, conjugando los intereses legÃtimos de
ambas partes, estableciera un sistema de uso, responsabilidad y
desahucio realista y no utópico o simplemente creara un
procedimiento de urgencia, tal como sucede en otros paÃses de
nuestro entorno, que permitiera resolver el problema de la falta
de pago o incumplimiento de los contratos en un breve plazo, la
oferta de los pisos de alquiler se mejorarÃa enormemente y que
ello provocarÃa la bajada de las rentas y su accesibilidad a
mucha gente, no solo joven, que necesita de una vivienda y no
quiere o no puede comprarla. Pero como esto, que es lo fácil,
parece imposible, bien vale la pena buscar soluciones
imaginativas y no echar en saco roto la idea de mi amigo y del
PSM.
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